Autores:
Categoría:
Cadera
Introduccion:
La infección periprotésica constituye una de las complicaciones más importantes dentro de la artroplastia de cadera. Cada vez resulta más frecuente la incidencia de infecciones en pacientes con implantes bien integrados, muchas veces incluso con implantes de revisión. Aunque el tratamiento más estandarizado es la revisión en dos tiempos, la extracción de implantes bien fijos constituye un reto terapéutico.
Objetivos:
Mostrar nuestra experiencia en el recambio parcial en dos tiempos en pacientes seleccionados.
Material y metodología:
Planteamos un estudio observacional, descriptivo y retrospectivo de los casos de infección periprotésica de cadera tratados mediante esta técnica entre el 2009 y el 2018. Para el estudio, conjunto con el servicio de infecciosas, se tomaron los datos de las historias clínicas.
Resultados:
El total de pacientes es de 4, siendo 1 varón y 3 mujeres. La edad media era de 60 años. En 3 casos se realizó en contexto de infección crónica y 1 caso en aguda. La media de la PCR al diagnóstico era de 71.7. Causas de reintervención: 2 por aflojamiento acetabular, 1 por aparición de fístula en muslo proximal y el restante por fracaso mecánico de los implantes. En los 4 se realizó un recambio parcial en dos tiempos a expensas del componente acetabular, dejando intacto el componente femoral. El tiempo medio entre las cirugías de recambio fue de 6 meses. Los microorganismos aislados fueron: 1 estafilococo aureus, estafilococo epidermidis en 2 pacientes y estreptococo mutans en el restante. Ninguno presentaron complicaciones durante los postoperatorios inmediatos. El tiempo medio de seguimiento actual es de 5 años. Los 4 pacientes han respondido favorablemente sin precisar nuevas reintervenciones.
Conclusiones:
Pese a que no consideramos el recambio parcial en dos tiempos como la opción ideal del tratamiento de infecciones periprotésicas, creemos que constituye una variante a tener en cuenta en aquellos casos donde sólo uno de los dos componentes se encuentra aflojado, planteando entonces exclusivamente el recambio del mismo. De esta manera, y al no actuar sobre el componente bien integrado, evitamos una serie de comorbilidades tanto intraoperatorias como postoperatorias derivadas de los esfuerzos quirúrgicos enfocados a la retirada de todo el material protésico.