Autores:
Categoría:
Rodilla
Introduccion:
La literatura avala la reconstrucción de ligamento cruzado anterior (LCA) en rodillas pediátricas pero revisando el estado de las fisis, ya que condiciona la técnica quirúrgica, tipo de injerto y diámetro de túneles óseos.
Objetivos:
Proporcionar datos sociodemográficos, técnica quirúrgica y fracaso de la cirugía primaria en niños/adolescentes intervenidos de reconstrucción LCA.
Material y metodología:
Estudio retrospectivo descriptivo de pacientes menores de 16 años intervenidos entre 2011-2018 de reconstrucción LCA con plastia autóloga de isquiotibiales. Se ha recogido datos demográficos, relacionados con la cirugía y clínicos postoperatorios. Se ha realizado 3 técnicas quirúrgicas en función de la madurez esquelética: epifisaria, híbrida y transfisaria. Todos fueron seguidos mínimo un año tras la cirugía. Se ha realizado un análisis estadístico, analizando las variables cualitativas con Chi-cuadrado y las cuantitativas con Kruskal-Wallis o U-Man-Whitney.
Resultados:
Se ha revisado 24 pacientes, 15 hombres y 9 mujeres, con edad media de 14,6+/-2,3 años. La rodilla más afectada ha sido la derecha (58,3%). El 83,3% han sufrido una rotura de LCA en actividades extraescolares. Todos, excepto un paciente, retornaron al deporte tras un año de la cirugía. El tiempo transcurrido hasta la cirugía es 147,5días. Se ha constatado un elevado porcentaje de lesiones asociadas: lesiones meniscales (79,3%), lesiones condrales (12,5%) y lesiones ligamentosas(4,2%). En función de la madurez esquelética de los pacientes, se ha realizado 15 técnicas transfisarias (62,5%), 5 técnicas híbridas (20,8%) y 4 técnicas epifisarias (16,7%). Únicamente 5 casos (20,8%) han requerido una cirugía de revisión con media de 21,6 meses desde la cirugía primaria hasta la sensación de inestabilidad de la rodilla. No se ha encontrado diferencia estadísticamente significativa que pueda ayudar a predecir un fracaso de la plastia.
Conclusiones:
Los resultados de nuestra serie arrojan datos similares a los encontrados en la literatura en cuanto a porcentaje de fracaso de la plastia. Nuestra experiencia concluye que, en los pacientes esqueléticamente inmaduros, preferimos realizar una técnica quirúrgica intraarticular con túneles independientes epifisarios, por encima de otras técnicas extraarticulares. Las limitaciones son el tamaño muestral y de carácter retrospectivo. Se requieren estudios comparativos entre las diferentes técnicas quirúrgicas en función de la madurez esquelética donde se detallen las complicaciones asociadas.